Orizaba a través de los ojos de un experto

Por: Diana Rojas

En la región de las altas montañas del estado de Veracruz se resguarda como un pequeño y humilde Edén el pueblo mágico de Orizaba

Las montañas que rodean a Orizaba son como paredes de naturaleza que encierran las risas y suspiros de sus visitantes y pobladores.

Son tantos los sitios para perderse que para aprovechar efectivamente el tiempo el servicio de los guías turísticos es pieza fundamental.

Foto: Diana Rojas

Uno de ellos, Arnulfo Silva Barthell, conoce la ciudad como la palma de su mano.

Por ello, recomienda visitar el teleférico, así como el cerro del borrego, el parque de los dinosaurios y el parque de las sonrisas.

Es en el parque de los dinosaurios donde se encuentra el guardián de la montaña, la figura del famoso tiranosaurio Rex, tan fotogénico como el paisaje a su espalda, una montaña de verde follaje.

Desde hace tres años y medio Arnulfo ejerce como guía en la ciudad natal de Francisco Gabilondo Soler, mejor conocido como Cri Cri.

Cada territorio tiene su historia y Orizaba está repleta de sitios importantes donde sucedieron acontecimientos históricos, eso y las leyendas que todo pueblo mexicano ostenta, de tantos relatos fue anfitriona la ciudad que incluso tiene un museo dedicado a contarlos.

Entre las explicaciones de los guías está el significado del nombre Orizaba, el cual proviene del náhuatl Ahuilizapan, Ahauializapan, “Lugar de aguas alegres” y se puede comprender al visitar el “ojo de agua”.

Aunque la temperatura promedio es de 15 grados, en los meses de invierno llega a los bajo cero.

Indiferentes a la temperatura del cristalino estanque, se puede encontrar orizabeños haciendo ejercicios de natación o jugando como si estuviesen en un día de verano, hay quienes aseguran que sus aguas tienen propiedades curativas.

Foto: Diana Rojas

Un punto imperdible es el palacio de hierro, ubicado en el centro histórico, el cual forma parte del patrimonio arquitectónico que tanto enorgullece a los orizabeños, junto con el castillo de Mier y Pesado y la catedral de San Miguel Arcángel.

Y, para los valientes, el cementerio de Orizaba es famoso también por su belleza arquitectónica y escultórica, la cual se constata en varias tumbas y la piedra del gigante, monolito de origen prehispánico, recibe su nombre por la figura gravada en la parte superior de un hombre gigante.

Según Arnulfo Silva, las características que hacen mágico a Orizaba son qué es sustentable el cien por ciento y por su cultura, gastronomía, además “que su gente se rige bajo valores y costumbres”.

El año pasado – recuerda- Orizaba fue elegido por tercer año consecutivo el mejor pueblo de México por la revista México Desconocido.

También obtuvo el galardón del mejor pueblo mágico del estado por Mi Veracruz 2020.

Foto: Diana Rojas

Para los amantes de la actividad física recomienda subir los 500 escalones, asegura que es una actividad de senderismo con gratificantes postales de la ciudad que terminará por robarles el aliento.

Antes de terminar la licenciatura se aventuró a ser la lumbrera que dirigiría los pasos de los visitantes interesados en querer más que solo la foto en cada lugar bonito.

Para Arnulfo es gratificante cuando después de un tiempo las personas regresan y se acuerdan de él.

Un detalle importante para él y sus colegas ya que en la memoria de los viajeros además de las experiencias vividas se queda las explicaciones y anécdotas de los guías.

“En lo personal, lo mejor de ser guía turístico es conocer gente, además que las agencias me han contratado como coordinador y animador de sus tours fuera de Orizaba y del estado”.