En el estado de Veracruz a sólo 40 kilimetros del puerto, hay un lugar mundialmente conocido por el perfecto flujo de agua que tiene su río. En este sitio, viajeros y deportistas se entregan a la ferocidad de las corrientes del río pescados, este bellísimo lugar es Jalcomulco.
Atraídos por esta sintonía entre aventura y pasividad nos aventuramos a conocer el pueblo de Jalcomulco y probar nuestra destreza en los rafts (traducción de balsas).
En esta ocasión los especialistas contratados fueron nuestros amigos de Diversión Extrema. Desde antes contactamos con Rosalía, quien amablemente nos guío y dio instrucciones vía telefónica hasta dar con el local.
Antes de iniciar nos dieron una cartas responsivas que teníamos que firmar, sinceramente esto si llega a ponerte nervioso, es cuando te convences de que vas a hacer algo que tardarás en olvidar.
Después pasamos a unos cuartos donde nos cambiamos de ropa, no todas las agencias tienen el espacio para que uno se cambie, por lo que es conveniente preguntar antes para ir preparados.
Antes de partir en la camioneta nos aseguraron los cascos y chalecos salvavidas, fue ahí donde conocimos a Tacho y su familia. Tacho es un experimentado instructor que hizo de este uno de los paseos más divertidos y poco técnicos.
A cargo de salvarnos en caso de caer de la balsa estaba su hijo Ramsés, un joven talentoso en kayakismo. Volverse un profesional en una disciplina siempre es un reto, pero el joven jalcomulqueño hacía ver la actividad como lo más natural.
Tal como si hubiese nacido para realizar el deporte, Ramsés ha crecido entre la práctica de las actividades del río, desde muy pequeño aprendió a manejar los deportes extremos de la zona.
Es vital para nosotros que nuestros guías e instructores nos inspiren seguridad y tranquilidad, unos cuantos chistes y buen manejo de la balsa nos aseguraron que Tacho era esa persona.
Antes de subirnos a las balsas nos dieron las recomendaciones necesarias para el uso correcto del remo, qué hacer en caso de que alguien cayese al agua, así como el control de las balsas.
Al adentrarnos en el río comenzó una cabalgata extraordinaria, si bien el nerviosismo nos acompañó durante todo el recorrido no nos impidió disfrutar de éste.
Además de la experiencia de realizar el rating es inigualable presenciar las curvas, las pendientes los colores que la naturaleza regala durante el camino, tanto flora como fauna.
Una vez nos atoramos entre las piedras, otra por poco nos volcamos, en otra estábamos perdiendo a nuestro único compañero varón quien estuvo realmente a centímetros de salirse de la balsa. En todas estas situaciones con un firme sentido del humor, nuestro instructor a cargo nos indicó como movernos y maniobrar en cuestión de segundos.
Tacho nos relató cómo inició desde temprana edad en la actividad, teniendo como otras opciones el trabajar en el campo o probar suerte fuera del pueblo, decidió muy seguro de sí que su lugar estaba en el río.
Todo empezó cuando un “gringo” llegó al pueblo y aunque no hablaba muy bien el español comenzaron a frecuentarse para practicar el rafting. Con el paso del tiempo el norteamericano impulsó una pequeña academia del deporte en el pueblo.
La fama del estratégico lugar y los audaces instructores fue creciendo y poco a poco los lugareños invirtieron en el rafting hasta generar lo que se conoce como uno de los mejores lugares en México para realizar el deporte.
Al finalizar nuestro recorrido de casi 20 km un grupo de turistas nos recibió con aplausos y vitores, se sentía como haber ganado en el circo romano.
Después de la aventura y ya sintiéndose el cansancio en el cuerpo nos dirigimos al pueblo y buscamos donde saciar el hambre que la actividad nos había dejado.
Al cruzar el puente colgante en ambos extremos encontrarás restaurantes y cocinas económicas, muchos especializados en mariscos y antojitos. Entre la gastronomía de Jalcomulco es reconocida la acamaya, mejor conocida en otros lugares como langostino, así como las crucetas, un cactus alargado con sabor similar al del nopal.
Compartimos el mapa de indicaciones para llegar a Jalcomulco desde Xalapa, sin embargo, es posible llegar también por Córdoba, Orizaba y Veracruz puerto. En nuestro caso salimos desde el puerto cada que hacemos este tour.
Precios para rafting
Dependiendo el número de asistentes y de operador es como el precio pudiera variar.
Para un grupo pequeño el precio por persona está entre 500 y 800 pesos por persona. Si los grupos son más grande y el operador los consiente pueden tener un descuento grupal.
En caso de que vayas solo el precio puede elevarse y toma en cuenta que necesitarás un grupo para hacer la actividad. Si vas entre semana no tendrás mucha posibilidad ya que la afluencia es en fines de semana y solo durante esos días podrías compartir la balsa con más personas.
Puntos a considerar
El descenso en río es apto para toda la familia durante casi todo el año.
La edad mínima es de 6 años, dependiendo del operador podrás saber la edad máxima, con nuestros amigos de Aventura Extrema pueden ir personas de hasta 80 años.
Ten en cuenta que la temporada de descensos extremos es de septiembre a octubre, después de las lluvias, en Julio y Agosto la corriente es bastante más rápida.
Generalmente los paseos que ofrecen los operadores incluyen un aperitivo.
Tu experiencia será mucho mayor si te hospedas en algún campamento.
Es indispensable que lleves una cámara resistente al agua, ropa de secado rápido, zapatos especiales.
La mayoría de los operadores ofrecen adicionalmente otras actividades de aventura como el cañonismo, el rappel y la escalada.
Esta es la página de Diversión Extrema, su ubicación es muy práctica ya que inmediatamente después de la actividad puedes ir a cambiarte de ropa en unos cuartos y el restaurante con el que trabajan es limpio y tiene buenos costos.
¿Lo volverías a hacer?
Por nuestra parte, aún con el envaramiento del día siguiente, aseguramos que volveríamos a realizar el rafting en alguno de los tours futuros. También esperamos ver a Ramsés seguir participando y crecer en el deporte por muchos años.
La cultura, las artesanías, pero sobre todo por ser un excelente destino para la práctica de actividades de aventura como el rafting, la tirolesa, el rappel, la bici de montaña, gotcha, senderismo, vuelve a Jalcomulco en un destino muy completo.
En el camino de regreso me puse a cavilar, recordé que hace tiempo cuando era pequeña, salía a jugar largas horas por la tarde con mis amigos (soy de esas generaciones que jugaban en la calle hasta tarde sin ningún temor).
Al escuchar mi nombre corría a casa y suplicaba a mi mamá que me dejara quedar otros cinco minutos. Esta experiencia me ha hecho querer quedarme en este hermoso lugar llamado tierra. Estoy segura de que el día que llegue el fin de mi vida llegaré a la presencia de mi padre y le rogaré quedarme otros 5 minutos más.
Recuerda cuidar los espacios a donde sea que viajes, sobre todo ríos, así podremos heredar a las futuras generaciones experiencias inolvidables.
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