Un viaje imparable por Orizaba

Cuando pienso en hacer un viaje para la ciudad de Orizaba pienso en los bellos lugares como ojo de agua, las vistas hermosas de las montañas que rodean la ciudad, pienso también en la comida, en el clima tan fresco y acogedor.

Gracias a mi trabajo visito Orizaba muy seguido, una ciudad de las llamadas pueblos mágicos, reconocimiento que se hace a nivel nacional y sólo se otorga a aquellos lugares que cumplen ciertos requisitos de limpieza, orden y estructura.

Foto: Diana Rojas

Orizaba ha sido catalogada en los últimos años como uno de los pueblos mágicos más bonitos de México. Y es verdad, la ciudad pintoresca ubicada en las altas montañas del estado de Veracruz tiene tantos atractivos que recorrerla en un día es casi imposible. Casi, imposible.

En el último viaje a Orizaba sentí lo que nunca, me quedaron pocas ganas de regresar. Pero no se alarmen, inmediatamente después, un día para ser exactos, se me quitaron esas malas ganas.

Al día de hoy que escribo esto ya quiero ir de nuevo, quisiera recorrer el Poliforum de Mier y Pesado o pasear por la alameda.

En una travesía sin respiro, nos enrolamos para conocer la bella ciudad de Orizaba, solo esto en sí resulta una locura pues para hacerlo más interesante lo hicimos con más de cuarenta clientes. Todos con su paso, con las distracciones naturales que todo viajero cae ante ellas.

Visitamos en un solo día alrededor de 15 puntos importantes del pueblo mágico, comimos algunos de los antojos rápidos, las tortas, por ejemplo, fueron bien recibidas.

El viaje fue bueno, tuvimos algunos contratiempos y un accidente que se puede catalogar como notable. Una de nuestras clientes sufrió una caída y todo parecía venirse abajo. Fue así durante unos diez minutos, luego hubo remedio y gracias a Dios, salimos adelante, a Dios y al excelente equipo de protección civil de Orizaba. No paro de maravillarme de esa ciudad.

Suelo preocuparme mucho, pero esta vez creo que tuve razón.

Foto: Diana Rojas

En el parque de los dinosaurios, les recomendamos, por cierto, ser muy cuidadosos, un pequeño desliz y gracias a la humedad de la bella ciudad nuestra clienta acabó en el piso y ya de ahí no pudo seguir sola durante el resto del viaje.

En seguida llegó un policía y de inmediato llamó a Protección Civil de la ciudad, por nuestra parte nos movilizamos para hacer llegar el autobús donde ella.

Afortunadamente el asunto no fue tan grave, el diagnostico resultó en un esguince y un tobillo alarmantemente hinchado.

Nuestra travesía no terminó mal y el resto del grupo disfrutó del recorrido. En todos los viajes surgen imprevistos, no importa de qué genero hay que esperarlos y hacerles frente de la mejor manera.

El mejor consejo para visitar un solo lugar en poco tiempo es el siguiente; ¡no te estreses!

Mejor visita lentamente y disfruta de lo poco que puedas ver, pero que sea un paseo de calidad.

Orizaba es perfecta para sentarte un buen rato en su palacio de hierro a tomar un café, caminar lentamente por los jardines del Poliforum, si te gustan los animales, entonces podrías recorrer el paseo del río completo.

Aunque quisiéramos quedarnos todos los días de la semana en Orizaba, nuestro estilo de viaje es en muchas ocasiones de ida y vuelta nos esforzamos para que nuestros clientes recorran los puntos imperdibles y puedan disfrutar de ellos mirando con esos ojos de aventura que los ojos de la rutina ya no ven.